Los intérpretes sanitarios viven situaciones emocionalmente estresantes en las que, si no disponen de las estrategias para afrontarlas y superarlas, pueden llegar a sufrir agotamiento físico y mental, desgaste por empatía o incluso trauma vicario. En esta comunicación, que toma como referencia la literatura existente y los datos recabados a partir de una encuesta realizada a intérpretes que trabajan en el ámbito de la salud en España y en Estados Unidos, se sugieren estrategias que podrían resultar de utilidad para que los intérpretes identifiquen los factores estresantes que les afectan y sepan disminuir su impacto. Asimismo, se plantean propuestas metodológicas para incluir la enseñanza-aprendizaje de técnicas de autocuidado en los cursos de formación de interpretación sanitaria.